17 de mayo de 2012



Cuando me imagino cosas que no me hacen bien se me llena el estómago de náuseas y parasimpáticamente me preparo para vomitar todo lo que no puedo decir. Tengo miedo que eso a vomitar sea odio y que la sonrisa que hoy sentí surgir al cantar aquella letra que en algún momento nos unió se seque, mis ojos se vuelvan negros y escupa y vomite sin parar las asquerosidades que siento. A partir de ahí no existiría retorno.





15 de mayo de 2012



Extraño los cachetes gordos de chocolate, masas, bombas, crema, quesos y panqueques.

13 de mayo de 2012





Si alguna vez me cruzas por la calle, 
regálame tu beso y no te aflijas si ves que estoy pensando en otra cosa
no es nada malo es que pasó una brisa,
 la brisa de la muerte enamorada que ronda como un ángel asesino, 
más no te asustes siempre se me pasa, es sólo la intuición de mi destino.





12 de mayo de 2012




Yo antes tenía un guión para disparar a punta de pistola contra la vida. No me sirve tan sólo el alza para romper los esquemas de la simple soledad. Se desdibuja el suelo, deja de ser un lejano sueño, se está gestando la desesperación del agujero que produce no poder salir de la cama por miedo a que te coma el universo. El plano simbólico está predominando sobre el imaginario, y si nos gana la batalla el Gran Otro, we're fucked.




10 de mayo de 2012



Sonrisas, sonrisas, sonrisas otorgadas por el principito más hermoso del mundo.


 Un caricia al 



8 de mayo de 2012



Ayer soñé que estaba sentada sobre un lienzo negro enorme y mientras me miraba desde una omnisciencia superior, el lienzo se iba achicando y a medida que se achicaba se comía el piso, en su lugar se abría un precipicio, el cual emanaba humo y del que subían como lanzas chorros de lava. No sé si era el mismísimo infierno que se estaba abriendo frente a mí que no iba a parar hasta tragarme ó si simplemente se estaba terminando la tierra tal como había deseado hacía un par de días. Tampoco sé si por el calor que subía o por la desesperante sensación de no tener salida fue que empecé a sudar sin parar y se me ocurrió que quizás si empezaba también a llorar podría refrescar semejante llamarada de angustia materializada. Con ganas y sin demasiada fuerza, la situación lo ameritaba de sobra, emané los lagrimones más grandes que alguna vez había visto. Los primeros caían en los pedazos de lienzo que aún me rodeaban, los demás se evaporaban antes de llegar al piso. La aureola de fuego me alcanzaba, me quemó los pies hasta ampollarlos, me sentía consumida y deshidratada. Se terminó, empecé a caer de cabeza y en picada a lo que no era solo lava sino miles de muertos esperándome para devorarme antes de morir quemada.

Las lágrimas no sirvieron en ese mundo paralelo, pero en éste, que no es tan distinto de aquél, inundaron mi almohada y me hicieron pasar un largo rato de desvelo.








Concha de la lora, nunca pensé que iba a poder escuchar tantas veces una misma canción, la prefiero clavándome puñales constantemente antes que el silencio, porque después de un rato la canto moviendo la cabeza y con una sonrisa. El estribillo a gritos, obvio.





7 de mayo de 2012




¿Cuánto falta para que explote el planeta tierra y volvamos todos realmente insignitficantes? Haya sangre y pedazos de cuerpos por todas partes, ojos flotando como canicas y quizás algún que otro infeliz pasando con una nave espacial, mirando todo mientras come pochoclos de un balde. Si explota de una vez se termina todo intento de recuperación y la ecuación cierra redonda. Volvemos a ser realmente insignificantes sin un cuerpo ortopédico que lo vaya a sentir, volvemos al punto más ínfimo que podría existir sin realmente sentirlo porque la fragmentación de la totalidad no permite la retroalimentación del sentimiento. Sin dedos no hay anillos que poner y por lo tanto no hay dolor que soportar. Chau.




6 de mayo de 2012

5 de mayo de 2012





Las eternas demostraciones de amor no sirven si el que las recibe no está seguro de que son para él, hete aquí mi odio y total repugnancia a los títulos y todas las expresiones exageradas de los enamorados.