17 de junio de 2011

Cartas a un escritor II

17 de Junio de un año con muchos números.

Dear You,

Liberando todas las tensiones que hace mucho tiempo sentía, hoy podemos decir que somos algo que ya no es la individualidad ni tampoco la formalidad del conjunto. ¡Miranos! Todavía no encontré tu piso en esta cuidad tan nueva para mí y ya tan vieja para vos, sin embargo sigo buscando. Creo que después de todo es un poco lo que me toca hacer, caminar un buen rato hasta encontrarte y poder darte el abrazo que tanto esperé.

Lamentablemente, no traje mi mejor par de zapatos y tengo miedo que se desgasten las suelas, pero las últimas cartas que me quedaron tuyas tienen un aroma a calle de piedra, un pequeño balcón, volutas de humo y también una mágica puesta de sol... no estoy tan sin rumbo.

Voy preguntando de a poco, en pequeños recovecos que tranquilamente podrías haber visitado, si te han visto, si tienen una idea de dónde estás. No me ayuda llevar una foto tuya tan distante del presente pero, supongo que es mejor que exponer tu caligrafía. Solamente te pido que (estoy realmente segura de que tus cartas tienen aire a balcón, apostaría mis zapatos) te sientes a mirar la puesta de sol más seguido, quizás así reconozca tus medias rayadas desde abajo.

Caminando con zapatos de hebilla,
Sally.

No hay comentarios:

Publicar un comentario